La fibra de carbono ha sido durante mucho tiempo el material preferido en industrias como la automotriz y la deportiva, gracias a su resistencia, ligereza y apariencia estética. En este contexto, cobra especial relevancia nuestra colaboración con IXO, una empresa especializada en la elaboración de piezas de lujo de composite y partner oficial de la marca Bugatti.
Fibra de carbono para automóviles: alta tecnología y lujo
En el emocionante mundo de los superdeportivos de lujo cada detalle cuenta. Las marcas líderes, como Bugatti, se esfuerzan por ofrecer productos de la más alta calidad y rendimiento excepcional, por lo que no es casualidad que la empresa IXO esté detrás de muchos de sus proyectos.
En los últimos años, IXO se ha convertido en sinónimo de estilo, rendimiento y exclusividad, fruto de su trabajo meticuloso y su filosofía minimalista, de “menos es más”. Todas las piezas que saca al mercado son reconocidas como verdaderas obras de arte y son el resultado de combinar los mejores materiales con el trabajo artesano más dedicado.
“Utilizamos todos los recursos que están a nuestra mano: toda nuestra ilusión, nuestra alma, las incontables horas de equipo trabajando codo con codo… buscando la perfección en cada detalle”, asegura Pedro Sánchez, general manager de IXO. “El acabado de la fibra de carbono en todos nuestros productos es personalizado. Con el trabajo artesanal del equipo aseguramos la consistencia de cada pieza creada en el taller. Un proceso que puede llevar hasta 30 días”.
Los vehículos de la marca Bugatti son un buen ejemplo de que exprimen al máximo sus capacidades cuando trabajan con la fibra de carbono. Productos excepcionales que combinan elegancia y funcionalidad. Desde alerones traseros hasta carcasas de espejo y splitters delanteros. Cada pieza está diseñada para brindar una aerodinámica mejorada y un aspecto elegante.
¿Por qué trabajan con fibra de carbono?
La fibra de carbono es un material compuesto, fabricado a partir de hebras de carbono extremadamente delgadas, que se entrelazan y se refuerzan con una resina especial. Este proceso de fabricación da como resultado una estructura fuerte y liviana que supera a otros materiales en términos de resistencia y rigidez. Además, la fibra de carbono es altamente resistente a la corrosión y tiene una excelente relación resistencia-peso.
Fibra de carbono más allá de los automóviles
Todas las piezas que salen de IXO son conocidas por su diseño impecable y atención meticulosa al detalle, ya estemos hablando de automóviles, de mesas de billar o de botellas de champán.
Una de sus últimas creaciones ha sido esta botella de champán de fibra de carbono: “La Bouteille Noire”, que tiene uno de los tamaños más grandes que hay en el sector, con una capacidad de 15 litros. En cuanto a su forma, es indudable que se ha inspirado en el Bugatti del que toma el nombre.
El estuche de la botella es de fibra de carbono y en su fabricación se han empleado 150 horas de trabajo y unas 314 láminas individuales de este material. Cuenta, además, con una celda de enfriamiento termodinámico automático y se abre pulsando un botón de acero inoxidable. Para asegurar su suavidad, lleva incorporado un sistema de bisagras técnicas que liberan también el cuello de la botella.
Otra creación que lleva la firma de IXO y de Bugatti es esta mesa de billar bautizada como Elysium. Se trata de la primera mesa de billar fabricada con este material (fibra de carbono) y la primera en incorporar la última tecnología en control electrónico industrial, lo que permite ofrecer una experiencia de usuario única, nunca vista hasta el momento.
Su exclusividad, la calidad de los materiales de construcción, los acabados en fibra de carbono y su tecnología de autonivelación, que sirve para nivelar cada pata de la mesa en el caso de que sea instalada en un yate, compensando el movimiento del mar, es lo que la hace tan especial.
Entre los accesorios que se incluyen en los 250 mil euros que tiene de precio se encuentra un mueble de pared en carbono para colocar los palos y los demás enseres, una pantalla táctil de 13 pulgadas en la cual se visualizan las puntuaciones de las partidas, unos tacos de carbono con piezas en aluminio anodizado cepillado y una lámpara LED en carbono para colocar en el techo, justo encima de la mesa, así como una caja en aluminio anodizado negro para la tiza, un cepillo de limpieza, un USB con imágenes y vídeos del proceso de fabricación y una maleta de cuero para llevar las bolas.
Para optimizar el proceso de elaboración de estos objetos, 100% exclusivos, IXO contó desde el principio con nuestras autoclaves para la fabricación de composite. El hecho de que una empresa como esta se haya fijado en nuestra compañía familiar, con más de 78 años de experiencia en la fabricación de autoclaves, hornos, generadores de vapor, sistemas de control y todo tipo de aparatos a presión, nos enorgullece y nos permite también ser parte de algo grande, extraordinario y duradero en el tiempo.